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Supply Chain Frontiers issue #51. Lea todos artículos en este asunto.

El Zaragoza Logistics Center (ZLC), en Zaragoza, celebró su 10.o aniversario el pasado mes de octubre. El ZLC es uno de los principales centros en Europa para la formación e investigación en la cadena de suministro, así como un actor clave en la estrategia regional para usar los clústeres logísticos como motor del crecimiento económico.
  En 2001 el Gobierno de Aragón, en el norte de España, se dio cuenta de que su economía había pasado a depender demasiado de un pequeño grupo de industrias, principalmente la de los fabricantes de automóviles. Desarrolló un plan estratégico para sacar partido de la fuerza histórica de la región como cruce internacional para el comercio.

El plan era transformar la región en un núcleo logístico. Una característica principal fue la creación de un clúster logístico, un conjunto de empresas y funciones empresariales situadas en la misma región que comparten experiencia y conocimientos. Este intercambio de recursos puede comportar unas ventajas considerables en costes y servicios para las empresas del clúster.

Avanzamos hasta el año 2013 y el éxito de la estrategia es claramente visible. El parque logístico más grande de Europa, PLAZA, está situado justo en las afueras de Zaragoza. Centenares de empresas, incluyendo empresas globales como Inditex, están presentes en el parque logístico. PLAZA da trabajo a unas 12.000 personas.

El interés del Gobierno de Aragón en la implementación de su plan para la diversificación de la base industrial de la región es un factor decisivo para el éxito de PLAZA. Pero existen otras lecciones importantes para cualquier autoridad local o nacional que quiera aprovechar el poder de los clústeres logísticos para crear actividad económica.

«El factor académico tiene una importancia crucial», afirma el profesor Yossi Sheffi, director del Centro para el Transporte y la Logística del MIT (MIT CTL) y autor del aclamado libro sobre el crecimiento de los clústeres logísticos, Logistics Clusters: Delivering Value and Driving Growth (MIT Press, octubre de 2012).

A la vez que constituye un banco de profesionales formados de los que el clúster puede sacar provecho, un socio académico también proporciona una plataforma para la investigación e innovación. El modelo se ha utilizado en muchos clústeres logísticos en todo el mundo, según Sheffi. En el caso de PLAZA, el Gobierno de Aragón se asoció con el MIT CTL para ejecutar su estrategia económica. Crearon programas de formación e investigación mediante el programa MIT-Zaragoza International Logistics, que se lleva a cabo en el ZLC.

La oferta de formación incluye varios cursos profesionales, un programa de doctorado y el programa más emblemático, el máster del MIT-Zaragoza en Logística y Gestión de la Cadena de Suministro (ZLOG). Ideado a partir del programa de Gestión de la Cadena de Suministro del MIT CTL, el ZLOG atrae a estudiantes de todo el mundo. También existe un máster de Logística (MdL) a tiempo parcial impartido en español que se ha convertido en una importante fuente de talento para el clúster local. Dirigido por un graduado del máster del MIT-Zaragoza y doctorado, el programa se rediseñó recientemente para satisfacer las nuevas necesidades de la industria regional.

Jose Luis Carreras, director de la División de Transporte del proveedor de servicios logísticos español Carreras Grupo Logístico, cree que el MIT CTL «aporta prestigio, conocimiento y contactos de una institución académica líder con prestigio a nivel mundial en la logística» a la estrategia de la región para el crecimiento. «Además, refuerza la vertiente internacional del clúster logístico de Aragón», añade.

La relación simbiótica entre el ZLC, sus programas de investigación y formación, y PLAZA se ve fortalecida por el hecho de que el ZLC está situado físicamente dentro del parque.

El ZLC también forma parte de la red Global SCALE (por la sigla en inglés de «excelencia en la logística y la cadena de suministro») del MIT, y le proporciona acceso a los recursos de los centros de excelencia en Asia, América Latina y América del Norte. La red facilita los intercambios de estudiantes y los proyectos de investigación en colaboración.

Otro motor importante de la expansión de PLAZA es la multiplicidad de industrias que el complejo ha atraído. «Esto, de nuevo, es típico de un clúster con éxito. Significa que el crecimiento del clúster no depende de una industria concreta», puntualiza Sheffi.

El reto ahora es cómo hacer que PLAZA alcance el siguiente nivel de crecimiento, y esta cuestión se aborda de varios modos.

«Los clústeres logísticos se autopotencian. Las ventajas que ofrecen —como unos servicios de transporte más frecuentes y más baratos, y un mejor servicio al cliente— atraen más empresas, lo que aumenta las ventajas y hace que la entidad sea todavía más atractiva», explica Sheffi. PLAZA utiliza las reacciones positivas para aumentar su competitividad.
 
«Todavía tenemos mucho potencial como clúster y disponemos de la infraestructura y el espacio necesarios para acoger muchas más empresas que crean nuevos puestos de trabajo», según Carreras.

Además, «en Europa existe un gran impulso para la creación de parques logísticos por motivos de sostenibilidad», indica Sheffi. Los clústeres logísticos tienen una posición única para convertirse en centros de excelencia para las cadenas de suministro ambientalmente sostenibles, ya que son puntos centrales para el transporte de mercancías.

En un contexto más amplio, los clústeres son centros de innovación en la cadena de suministro, y esta es una de las áreas de especialización que el Gobierno de Aragón planea potenciar.

Por ejemplo, la Asociación Logística Innovadora de Aragón (ALIA) es una iniciativa creada por el ZLC, el Instituto Tecnológico de Aragón (ITA), el Consejo Aragonés de Cámaras de Comercio y la Oficina de Inversión Extranjera del Gobierno de Aragón. El objetivo principal de ALIA es aprovechar el éxito de PLAZA y «fortalecer el clúster con la identificación y el desarrollo de oportunidades para la investigación en logística, alianzas y la promoción de la región», según Carreras, presidente de ALIA.

La organización participó en un proyecto para disminuir el coste del transporte ferroviario entre Aragón, París y Bruselas, al mejorar los factores de carga del ferrocarril. Otra iniciativa ayudó a dos empresas a desarrollar e implementar tecnología de identificación por radiofrecuencia.

La misión de ALIA está en consonancia con la estrategia de especialización inteligente (llamada RIS3) de la Unión Europea, que anima a las regiones a fomentar ciertos tipos de especialización para promover el crecimiento económico.

Sheffi cree que los clústeres logísticos serán todavía más importantes para el comercio mundial en la próxima década. «En el entorno empresarial volátil de hoy en día las empresas necesitan la flexibilidad operativa y la agilidad que ofrecen los clústeres logísticos», afirma.

Esta tendencia es muy esperanzadora para el futuro de PLAZA. «El parque logístico está bien situado para sacar partido a estas necesidades, sobre todo mientras Europa se recupera de la recesión económica que ha obstaculizado el crecimiento de la región en los últimos años.»

Para obtener más información sobre el ZLC y PLAZA, contacte con la directora de marketing de ZLC, Cristina Tabuenca (ctabuenca@zlc.edu.es).