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La industria del petróleo y el gas ha aprendido mucho del reciente colapso en los precios del crudo y de los despidos masivos desencadenados por la recesión. Reconocer la importancia de contar con una cadena de suministro ágil es una lección que podría ayudar a la industria en la gestión de la volatilidad del mercado energético. Peng Bi y Remya Pushpangatha Kurup, en su tesis del programa de Máster en Gestión de la Cadena de Suministro, han estudiado cómo la flexibilidad de los proveedores podría mejorar la agilidad de la cadena de suministro en la industria. Han desarrollado una herramienta para valorar este rasgo tan importante, lo que podría ayudar a las empresas energéticas a aplicar más resiliencia en sus cadenas de suministro.

Según el Wall Street Journal, la recesión obligó a las empresas petroleras a rebajar aproximadamente en 1 billón de dólares sus inversiones en prospección de nuevos yacimientos de petróleo y gas natural. Las empresas de servicios del sector petrolero que se basan en proyectos industriales de inversión fueron las más afectadas por ello, señala el Journal.

Los proveedores capaces de ser flexibles ante los altibajos del mercado ayudarán a la industria a capear las tormentas económicas. En cualquier caso, los investigadores han descubierto que la flexibilidad del proveedor tiende a recibir mucha menos atención que otros factores críticos tales como los niveles de precios, calidad y servicio. Las empresas con capacidad de adaptarse a la volatilidad del mercado tienen muchas más posibilidades de sobrevivir a un descenso de la demanda. Pongamos dos ejemplos:

Un pequeño proveedor canadiense de la industria del petróleo y el gas resultó seriamente afectado por la recesión y despidió al 40% de sus empleados. Pero la empresa sobrevivió largo tiempo porque se diversificó hacia otros mercados, optimizó la producción y las operaciones, redujo los plazos de entrega y compartió las previsiones con otros distribuidores de la industria para conseguir una mejor comprensión de la demanda. El segundo ejemplo es el de una gran corporación con sede en EEUU que también compartió sus previsiones con sus iguales. Además, la empresa utilizó su amplia infraestructura productiva para ofrecer más flexibilidad de producción.

Se puede afirmar que las empresas ya estaban teniendo en cuenta la flexibilidad de los proveedores. Esto se demostró durante una investigación sobre directores de categoría que los investigadores llevaron a cabo. Se preguntó a los directores qué capacidades, según su experiencia, alentaban la resiliencia de los proveedores ante las adversidades del mercado. Las respuestas señalaron factores tales como la dependencia de los proveedores del negocio del petróleo y el gas, su grado de integración vertical, y su flexibilidad financiera.

No obstante, confiar en las percepciones de los directores individualmente considerados no es suficiente. Cada industria tiene un perfil de riesgo distintivo, y la mezcla de factores en los que sustentar la flexibilidad en el negocio del petróleo y el gas es singular para este sector. Además, para valorar con efectividad la flexibilidad de suministro, las empresas necesitan una herramienta de evaluación que puedan integrar en sus estrategias corporativas de gestión del riesgo.

Los investigadores han desarrollado dicha herramienta. Tras entrevistar a directivos y proveedores del sector, y tras estudiar las actuales prácticas de valoración de proveedores, crearon una lista de referencia con 29 factores de flexibilidad para la industria del petróleo y el gas. La lista quedó confirmada mediante la encuesta a los directores de categoría. Se pidió a los encuestados que valoraran la importancia de los factores enumerados, así como qué otros factores contribuían a la flexibilidad de los proveedores.

Se creó la lista de referencia en un marco que creara las bases de una herramienta basada en el Excel de Microsoft para evaluar la flexibilidad de los proveedores. La herramienta incluye una sección de autoinformes donde los proveedores contestan a preguntas sobre factores de flexibilidad y reciben una puntuación para cada respuesta. Por ejemplo, sobre flexibilidad en la contratación, se preguntó a los proveedores qué porcentaje de sus programaciones de contratación estaban basados en ser proveedores únicos. También hay una sección para directores de categoría que pueden evaluar las respuestas de sus proveedores. La cuarta sección proporciona un panel general del rendimiento en cuanto a flexibilidad de cada proveedor.

El objetivo no es rechazar a aquellos proveedores que no saquen buena puntuación. La herramienta está ideada para ser parte de los esfuerzos continuados de una empresa para monitorizar su red de suministro. Además, los investigadores creen que los proveedores pueden aprender de esta herramienta tanto como sus clientes.

Con demasiada frecuencia ocurre que la flexibilidad  desaparece de la pantalla del radar cuando las empresas valoran a sus proveedores. Es más, en el sector del petróleo y el gas, muchos proveedores desconocen el perfil de riesgo de la industria – por no hablar de la importancia de la flexibilidad.

Estas cuestiones son aplicables con independencia del tamaño. Un pequeño proveedor puede no contar con los recursos para hacer un seguimiento exhaustivo de la demanda del mercado o de las tendencias globales sobre energía, pero puede implantar medidas de bajo coste tales como planificaciones conjuntas con sus clientes y previsiones compartidas con compañías afines.

La herramienta puede perfeccionarse con más datos y más experiencias de usuarios, de tal forma que la próxima vez que los precios del petróleo se desplomen la industria estará mejor preparada. Además de causar muchos traumas, los despidos y las bancarrotas infligen un daño inmenso a la base de suministro, alargando los tiempos de recuperación y provocando que las empresas pierdan oportunidades a medida que la recuperación económica se asienta. Un número escaso de proveedores obliga a las empresas a invertir en la búsqueda de nuevos proveedores que reúnan los requisitos.

Estas lecciones no son sólo aplicables a la industria del petróleo y el gas. El estudio indica que aunque las empresas de otros sectores, tales como el sector electrónico, tienen en cuenta la flexibilidad de sus proveedores cuando los evalúan, sus análisis carecen del rigor sistemático de una herramienta de evaluación que forme parte de un programa de gestión del riesgo.

La tesis sobre GCS (Gestión de la Cadena de Suministro) de Peng Bi y Remya Pushpangatha Kurup “Cómo Valorar la Flexibilidad de los Proveedoresfue supervisada por el Dr. Roberto Perez-Franco, Investigador asociado del Centro para el Transporte y la Logística del MIT (roberto@mit.edu). Para obtener más información sobre la tesis póngase en contacto con el Dr. Perez-Franco.

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